Tajana: La nueva creación de Daniel Ovadía y Salvador Orozco

Dirección: Av. Secretaría de Marina 429, Lomas del Chamizal, 05129 Ciudad de México, CDMX

Teléfono: 01 55 7030 0777

Página web: http://www.danielovadia.com.mx/

Tipo de comida: Medio Oriente

Categoría: $

Relación CP üüü

Nota: Cerrado viernes a partir de las 18:00 hrs hasta el sábado a las 21:00 hrs.

Ubicado en Bosques de las Lomas, es una nueva propuesta de comida israelí informal. Es un local pequeño, discreto, cuyo encanto yace en su comida. Como sabemos, ellos son creadores de diversos recintos, entre los cuales destaca Merkavá, también de comida del medio oriente; lo que nos habla de su vasta experiencia en este tema.

Al entrar, lo primero que uno percibe es música popular en hebreo, y lo segundo es el olor de la carne/pollo al carbón, y el horno de piedra donde hacen la pita al momento. La carta es corta, pero suficiente para el tipo de propuesta, dando opciones de carne, pollo y vegetarianas. Por lo mismo, con dos visitas fue suficiente para probar la mayor parte de la misma.

La recepción, aunque informal, es cálida, recibiendo a todos sus comensales con un plato de pan pita tostado, con aceite de oliva y Zaatar. El servicio es atento, nunca falta nada. Constantemente tanto los meseros, como la gente de cocina, están atentos a la comodidad y gusto de la comida.

Primero que nada, abordaremos el tema del pan pita. Tienen un horno de piedra, y una persona dedicadas exclusivamente a esto. El pan se elabora al momento de pedir la orden, este se cose mientras el resto del plato está listo. Por lo que es el pan más fresco, caliente y suave posible.  Desde aquí, TODO bien.

En la primera visita elegimos el Steak and Egg, que nos ofrece un concepto de verduras distante al común, incluyendo lechuga a las brasas, alcachofa en conserva, perejil fresco, tehina, 120 gramos de rib eye, y un huevo estrellado. Suena raro, desde la lechuga hasta el huevo, pero solo basta mantener la mente abierta para pedirlo, y comerlo para disfrutarlo. Es impresionante, el sabor de las especias, la suavidad de la lechuga, la frescura de la carne, y la textura del huevo. También pedimos la pita con kebab de res, el cual incluye berenjena frita, ensalada de papa con huevo, humus, arúgula y aceite de oliva. El kebab tenía todo lo que nos gusta, y carecía todo lo que nos disgusta: el condimento fue balanceado (cosa que muchas veces falta, llegando a ser excesivo), cocido a las brasas, generando una corteza crujiente y un interior suave. La berenjena frita junto con la arúgula, aportaban un toque amargo al plato, logrando integrarse perfectamente con el kebab. Simplemente increíble. Tan bueno fue, que nos quedamos con ganas de más, por lo que regresamos en menos de una semana.

La segunda visita fue más abundante, e igual de deliciosa.  Primero pedimos el de schnitzel de pollo, con ensalada de papa, sauerkraut (col en conserva), cebollas rostidas, y limón amarillo. El pollo junto con la col crujientes, la papa y la cebolla suaves, mezclando sabores ácidos (col y limón), junto con otros más dulces (cebolla), logrando un plato bien integrado, y con gran sabor. También escogimos el shawarma de pavo, humus, ensalada de perejil, cebolla morada y piña asada. El pavo está preparado en trompo junto con la piña, logrando fusionar ambos sabores, el perejil aportó un toque fresco, y el resto dio el toque final para lograr un shawarma perfecto. Como nos quedamos con hambre (a pesar de ser porciones de moderadas a grandes), pedimos el parguit (muslos de pollo deshuesados) con salsa matbucha, humus, y ensalada israelí con tehina. Como sabemos, la salsa matbucha en ocasiones tiende incluso a ser ácida, pero no en este caso, la usan para marinar el pollo horas previas a ponerlo a las brasas. El humus, ya conocido desde Merkavá, es suave, con ligero sabor, en buena porción, integrándose perfecto con el pollo. De nuevo, simplemente delicioso.  

Finalmente cuentan con una tarjeta de cliente frecuente, la cual con cada visita sellan, y a la décima visita te dan un plato gratis.  Siendo un excelente motivador.

En conclusión, informal, pequeño, muy Israelí, acogedor, pan fresco, platos innovadores, bien elaborados, deliciosos. Ideal para una cena o comida rápida entre semana.

Nejmous